Al norte de Deux-Sèvres (79), en la frontera con Maine y Loira (49), Patricia y François le acogen en una antigua mansión de toba situada a las afueras del pueblo, en un gran terreno cerrado y plantado de árboles centenarios.
Tranquilidad garantizada en nuestra exclusiva habitación que cuenta con entrada privada. Cumple con las normas PMR y se encuentra en la planta baja (1 cama doble, cuna bajo petición), cuarto de baño con ducha a ras de suelo y aseo privado.
Patricia, su anfitriona, le ofrece sesiones de bienestar: relajación plantar, reflexología plantar craneal y facial, masaje Kobido (rostro), Chi-Nei-Tsang (estómago), en el interior o al aire libre, bajo el patio, en verano.
Avistamiento de aves: herrerillo común, pinzón, agateador, lechuza, lechuza, abubilla, arrendajos, pájaro carpintero verde, zorzales... y por supuesto ardillas. Prismáticos listos, telescopio terrestre.
Debajo del patio, mesa, sillas, vajilla y utensilios de cocina permiten comer in situ. Un frigorífico está a su disposición para guardar sus bebidas y alimentos.
Un piano es de libre acceso en la sala de estar.
Antes de salir a descubrir la región, un buen desayuno a base de productos locales y/o ecológicos le permitirá empezar bien el día.
Dependiendo del tiempo, será posible desayunar en el patio o en el jardín.
Recuerde informarnos de sus intolerancias alimentarias o posibles deseos al realizar la reserva.